Saul bendiciones.
El matrimonio es un proyecto bastante demandante cuando se sabe de su importancia en la vida cristiana.
Qué es lo que tu más quieres hacer ahora? Es imposible hacer ambas cosas a la vez? Si el matrimonio no se efectúa ahora ha de disolverse tu relación? Si tu relación es verdaderamente sublime, no hay manera de un apoyo mutuo en espera y comprensión para lograr para ambos un bien común?
Te cuento una historia real de unos amigos:
Se amaban mucho, hicieron una relación de Romeo y Julieta en contravía con los deseos de sus familias, se casaron y como ella no conseguía un buen trabajo, pues entonces se fue a Italia a ganar muy buen dinero. El se quedo solo acá 2 años y adivina que... hasta que recurrió a la infidelidad. Horrible cierto? y no es justificable, pero ya ves como se dio una circunstancia de abandono de las obligaciones maritales (compañia, intimidad, apoyo...). Dónde quedo el proyecto de amor? Qué interés primaba allí entonces?
Personalmente te invito a un real planteamiento del problema (es decir te dejo igual). El planteamiento del problema es muy tuyo: organizar prioridades, establecer compromisos de pareja, etc.
Si estas consultándonos quiere decir que sabes que el matrimonio es PARA TODA LA VIDA. No es poco común el querer hacer muchas cosas a la vez y menos cuando ambas son fuertemente demandantes de tiempo, dinero y dedicación, pero se necesita un orden.
Posponer no es malo ante los ojos de Dios, es malo PECAR y olvidar la CARIDAD y solo eso, el resto esta en el libre albedrío y no tienes que preocuparte de cosas como:
-Y si Dios quiere ahora un hijo para mi- o -Dios me la envió como rechazarla-, porque después dirías -Dios me dio esa oportunidad y la desaproveche-.
Ya ves, eso son ideas humanas. Dios permite circunstancias, uno maniobra en ellas. Eso si, fijado el vinculo con Dios, FIDELIDAD A éL. Es en el vínculo donde ya no hay marcha atrás.
Mejor dicho no te afanes, DA UN PASO A LA VEZ, habla con tu novia y se sincero, y pide al Espiritu Santo claridad para obrar.
BENDICIONES